sábado, 22 de octubre de 2011

Temporada01_Capitulo025_1997_LaDecision

La verdad es que con el día tan complicado que había pasado no sabia bien que contestarle. Yo pensaba en que la oferta que me había hecho sí era tentadora y honestamente tenía mucha curiosidad. Pero creo que necesitaba algo mas que curiosidad para poder ayudar a Judas en sus labores. Por otro lado también me confundía mucho como es que adquiriría las habilidades de él y que además, esa habilidad de poder ‘bloquear’ mis recuerdos que el tanto quería ni siquiera yo mismo sabia como lo podía hacer … ¿Y si de repente eso fallara? ¿Me iba a quedar con mas recuerdos además de los que ya cargaba de mis vidas pasadas?.



De repente el cielo se empezó a poner muy oscuro y una fuerte llovizna que, aunque estábamos dentro del cubo de la escalera, nos empezó a alcanzar poco a poco.



- Quiero que vengas conmigo a ver algo - me dijo mientras todo se ponía mas obscuro y la lluvia se escuchaba mas fuerte.



En un instante el ruido de la lluvia cesó y estábamos parados en una habitación muy blanca donde habían un par de médicos ayudando en la labor de parto a una mujer muy hermosa, de hecho, se me hizo un poco conocida.



- ¿Tarde o temprano el mareo desaparece verdad? - me hizó notar Judas.



Yo asentí con la cabeza mientras veía como los médicos estaban batallando un poco para traer al mundo a un bebe. Después de un rato lograron hacer que saliera del cuerpo de su madre y uno de ellos lo tomó de forma delicada y se alejó un poco hacia una pequeña mesita. Judas me hizo señas de que siguiéramos a ese Médico. 
Por un momento dudé. Paso por mi mente que tenía que llevarse a ese recién nacido y empecé a sentir mucha pena y angustia. ‘Ni edad ni condición social’ paso por mi mente. Pense en que Judas era demasiado cruel o crudo y que si creía que con eso me convencería pues estaba haciendo justamente lo contrario. Lo voltee a ver y el permanecía impávido, como si su rostro fuera el de una estatua.



Nos acercamos justo frente al Médico, y aunque sabíamos que no nos veía o escuchaba permanecíamos en silencio. En ese momento empecé a prestar atención al mobiliario y equipo de esa habitación. Todo era de aspecto antigüo pero muy bien cuidado, de hecho, podría pensar que hasta era nuevo. En especial el reloj que lentamente iba dejando correr los segundos. Seguí observando el lugar y fue cuando caí en cuenta de la fecha al toparme con un calendario : Octubre 25 , 1984.



En ese momento el llanto del recién nacido hizo que me sobresaltara. Fue cuando le preste una mayor atención y me di cuenta que era una niña. El médico estaba haciendo su revisión de rutina, estaba por revisarle los ojos y saco una pequeña lamparita. Observe como se contrarió y llamo a un asistente que acababa de entrar.

Sin decirle nada le indicó que observara mientras dirigía la luz hacia los ojos de la recién nacida.
En ese momento ví que movía los labios y le decía algo pero no lograba escuchar que era. Me trate de acercar a ellos y fue cuando Judas me tomo del brazo para que no lo hiciera.



- A veces, es mejor no oir nada cuando estamos aquí - me dijo con cierto tono de desprecio en su voz.

Vi como llamaban al otro Doctor y este se acercó presuroso, procedió a revisar también los ojos de la bebe. Vi como con un gran pesar se dirigió hacia la madre de la bebe que por lo que entendí estaba preguntando que era lo que ocurría. El Médico se acercó a ella y la Sra. empezó a llorar desconsoladamente. Fue cuando le acercaron a su Bebe y yo me solté de Judas y me acerque a ver que pasaba. La madre veía a los ojos de la bebe pero los ojos de la bebe parecían ausentes, sin brillo, sin vida. En ese momento me fijé un poco mejor en la Señora y fue cuando caí en cuenta de a donde nos había llevado Judas, de porque se me hacía tan conocida.



- Alicia … su nombre es Alicia - me dijó muy pausadamente.



Me había llevado a presenciar el nacimiento de Ella.

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