Seguía caminando pero sentía que cada vez lo hacía un poco mas lento, tenía unas ganas de regresar los pasos pero ¿que le diría o que haría? ¿que pensaría la Sra. que acompaña a esos lindos ojos?. Me arme de valor y quise regresar mis pasos pero justo en ese momento sentí como un pellizco en el tobillo que me hizo recordar mi reciente lesión … y ese fue el pretexto perfecto.
Desde que era un niño recordaba ese patrón de conducta, era muy extraño en verdad.
Las niñas literalmente me congelaban, si una me llamaba la atención o me gustaba, era suficiente para que tuviera pánico por si se percataba de mi presencia, no digamos de acercarme o decirle algo, eso era impensable. Lo peor del caso es que se hacia muy obvio porque de forma inmediata se me subía el color a la cabeza de pura vergüenza, lo cual me provocaba que quisiera evitar a toda costa algún tipo de contacto para no quedar en evidencia. Mantener perfil bajo en este aspecto, también era parte del día a día.
Pero con ella, ahora todo había sido tan diferente. No sentí pena, no trompique o algo por el estilo al caminar hacia ella, era como si … como si su tipo de mirada, ausente y vacía fuera el antídoto perfecto para mi ‘enfermedad’.
Regresé a casa pensativo y un poco mas ausente de los normal, por curioso que pareciera estaba tan absorto en mis pensamientos que no me importaba si la gente me volteaba a ver o algo así, de alguna manera esa paranoia e inseguridad paso a segundo termino.
Un poco antes de que cayera la noche hice mis ejercicios de rehabilitación, en realidad se suponía que ya debería de dejarlos y de poder regresar a jugar, pero no se si es el miedo a recaer en la lesión o si simplemente estaba tan enojado por la forma en que me lesione que no quería ya regresar. Básicamente los ejercicios consistían en fortalecer los muslos y pantorrillas, se suponía que si tenia la suficiente fuerza en ellos no le metería carga a mis tendones y no regresaría el dolor. Mas sin embargo, los seguía haciendo no se si por costumbre o por aferrarme a algo que tener que hacer en la tarde.
No se cuantas veces perdí la cuenta del numero de repeticiones que llevaba en mis ejercicios pensando en ella, ¿como se llamaría? ¿que edad tendría? … diablos !!! , me di cuenta que además de todo no sabía ni donde vivía y lo peor del caso es que es posible que no la vuelva a ver. Hasta es posible que fuera una turista y que al estar frente a la terminal ya hasta se haya ido de la ciudad. Necesito dejar de darle vueltas al asunto y mejor ir a cenar.
Por lo regular cenaba viendo la Televisión pero en esta ocasión ni siquiera se que estaban pasando, mis ojos estaban dirigidos hacia el aparato pero mi mente seguía pensando en Ella.
Otro patrón mas de conducta era la obsesión con algún tema, era cuestión de pensar en algo en particular para que me clavara pensando en eso, aderezando la situación con posibles supuestos que sólo estaban en mi imaginación. El dolor de cabeza me regreso y ni cuenta me di en que momento fue, en definitiva, ahora no me pienso tomar nada para mitigarlo y pues que se me calme un poco durmiendo.
Me dirigí a la cama y pues por extraño que parezca esta vez no me costo tanto trabajo dormir, de hecho, no recuerdo bien en que momento me quede dormido.
Empecé a soñar que estaba en una carretera, por el tipo de vegetación me di cuenta que ésta pasaba por un bosque. A lo lejos se veía que unos automoviles habían chocado, de repente ya estaba junto a los vehículos y de espalda hacia mi había una persona que cuando sintió que alguien se acercaba giro hacia mi ... cuando vi quien era sentí que se me helaba la sangre, era el Ser con el que había soñado una noche antes.
Desde que era un niño recordaba ese patrón de conducta, era muy extraño en verdad.
Las niñas literalmente me congelaban, si una me llamaba la atención o me gustaba, era suficiente para que tuviera pánico por si se percataba de mi presencia, no digamos de acercarme o decirle algo, eso era impensable. Lo peor del caso es que se hacia muy obvio porque de forma inmediata se me subía el color a la cabeza de pura vergüenza, lo cual me provocaba que quisiera evitar a toda costa algún tipo de contacto para no quedar en evidencia. Mantener perfil bajo en este aspecto, también era parte del día a día.
Pero con ella, ahora todo había sido tan diferente. No sentí pena, no trompique o algo por el estilo al caminar hacia ella, era como si … como si su tipo de mirada, ausente y vacía fuera el antídoto perfecto para mi ‘enfermedad’.
Regresé a casa pensativo y un poco mas ausente de los normal, por curioso que pareciera estaba tan absorto en mis pensamientos que no me importaba si la gente me volteaba a ver o algo así, de alguna manera esa paranoia e inseguridad paso a segundo termino.
Un poco antes de que cayera la noche hice mis ejercicios de rehabilitación, en realidad se suponía que ya debería de dejarlos y de poder regresar a jugar, pero no se si es el miedo a recaer en la lesión o si simplemente estaba tan enojado por la forma en que me lesione que no quería ya regresar. Básicamente los ejercicios consistían en fortalecer los muslos y pantorrillas, se suponía que si tenia la suficiente fuerza en ellos no le metería carga a mis tendones y no regresaría el dolor. Mas sin embargo, los seguía haciendo no se si por costumbre o por aferrarme a algo que tener que hacer en la tarde.
No se cuantas veces perdí la cuenta del numero de repeticiones que llevaba en mis ejercicios pensando en ella, ¿como se llamaría? ¿que edad tendría? … diablos !!! , me di cuenta que además de todo no sabía ni donde vivía y lo peor del caso es que es posible que no la vuelva a ver. Hasta es posible que fuera una turista y que al estar frente a la terminal ya hasta se haya ido de la ciudad. Necesito dejar de darle vueltas al asunto y mejor ir a cenar.
Por lo regular cenaba viendo la Televisión pero en esta ocasión ni siquiera se que estaban pasando, mis ojos estaban dirigidos hacia el aparato pero mi mente seguía pensando en Ella.
Otro patrón mas de conducta era la obsesión con algún tema, era cuestión de pensar en algo en particular para que me clavara pensando en eso, aderezando la situación con posibles supuestos que sólo estaban en mi imaginación. El dolor de cabeza me regreso y ni cuenta me di en que momento fue, en definitiva, ahora no me pienso tomar nada para mitigarlo y pues que se me calme un poco durmiendo.
Me dirigí a la cama y pues por extraño que parezca esta vez no me costo tanto trabajo dormir, de hecho, no recuerdo bien en que momento me quede dormido.
Empecé a soñar que estaba en una carretera, por el tipo de vegetación me di cuenta que ésta pasaba por un bosque. A lo lejos se veía que unos automoviles habían chocado, de repente ya estaba junto a los vehículos y de espalda hacia mi había una persona que cuando sintió que alguien se acercaba giro hacia mi ... cuando vi quien era sentí que se me helaba la sangre, era el Ser con el que había soñado una noche antes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario